En estos tiempos modernos, en donde las relaciones de pareja son poco constantes, la tolerancia y la persistencia no son ni mucho menos caracteristicas de las parejas jóvenes y en donde las prácticas de algunos comportamientos como; asistir a bares swingers o el involucramiento de terceras personas como parte de la fantasia, en gran parte masculina, en la relación de manera consentida, es importante rescatar un condimento que en mi practica profesional he evidenciado en parejas que llevan en su relación algo mas de 10 años. y no es pecar de mojigatos ni mucho menos, es simplemente tratar de encontrar qué, de todo lo que hay en nuestro compartir afectivo le puede brindar cierto equilibrio a la relación, para que la monotonía y la rutina no se apoderen de ella. Señoras y señores les presento; El Placer.
Definido como la sensación agradable que tiene una persona cuando satisface plenamente alguna necesidad.
Hay muchos tipos de placer; físico, emocional, estético, lúdico, intelectual. pero todos derivan en lo mismo, la segregación de endorfinas, que para que se haga una imagen de lo que hablo, no es ni nada mas ni nada menos que lo que se genera en el organismo cuando usted tiene un buen orgasmo. Eso, es placer.
Ahí esta el quid del asunto, cuanto placer logramos generar en nuestra relación de pareja y para ello, es importante que usted me permita hacer una pequeña restrospectiva de las fases que se dan en una relación.
El Enamoramiento
esta es la fase de la imbecilidad transitoria, que cosa mas maravillosa. uno respira amor, todo absolutamente todo es placentero. la forma como el otro camina, come, duerme, ronca, nada pero nada incomoda mientras estamos en esta fase. pero el enamoramiento tiene una magia; es temporal. Nadie vive enamorado toda la vida eso es mentira, solo se vive asi en los primeros tiempos de la relación por que alli nos encontramos en una adaptación al otro, en el reencuentro con uno mismo en este nuevo estado, por eso todo fluye, los intereses son compartidos asi que las discordias son limitadas y cuando las hay una mirada y una sonrisa son suficientes para ceder. Dificilmente hay desencuentros por que siempre esta el temor a la pérdida del otro. así que es en esta fase en donde mas placer se produce en nuestros cuerpos. lo que comemos, lo que sentimos, lo que exploramos, lo que amamos, lo que deseamos, siempre es elevado a la n potencia.
La Convivencia despues de un tiempo.
En esta fase la sensación de placer comienza a disminuir, por que de manera inconcsiente sentimos al otro como una propiedad. la convivencia permite eso, tal vez adueñarse, sentirse seguro del amor de nuestra pareja. y en este punto comenzamos a descuidarnos. aqui ya no generamos tantas sensaciones de placer en el otro por que suponemos que intrinsecamente hay una serie de obligaciones y asumimos una serie de roles, que se supone hacen parte de vivir juntos. Cuando esto sucede nuestras fantasías y nuestros imaginarios comienzan a cobrar una vital importancia, es en este momento en que yo recomiendo la búsqueda de estrategias para alimentar el placer del otro, para no caer en la desilución de lo ya obtenido, para no ceder frente a la tentación de lo que afuera hay inexplorado, aventurero y riesgoso.
La Monotonía y la rutina
Y por ende las discusiones se tornan mas frecuentes, la intolerancia aparece de lleno, las sonrisas que antes nos hacian ceder frente a las pretensiones del otro ahora se observan como una burla, comienza a evidenciarse el lenguaje mas venenoso del amor; la ironía y el sarcasmo. y para colmo de males el placer se desvanece como el agua entre los dedos. Muchos comportamientos obedecen a unos rituales ya impuestos inclusive aquellos que tienen que ver con las relaciones sexuales. Si usted logra, en esta fase de la relación de pareja incrementar la presencia del placer en todas sus dimensiones, le garantizo un feliz futuro. pero si usted no logra esto, la entrada a la última fase es inminente.
La Partida
Que nadie ha dicho que sea literal ni mucho menos fisica, solo afectiva. Es decir, nos encontramos para cosas mas tribiales del ámbito de la pareja; que hay que pagar los impuestos, el colegio de los niños, la plata de los uniformes, la cuota del apartamento y todas las multiples cosas mas que nos encargamos de crear para que simple y llanamente nos sigamos sintiendo acompañados con el otro. en la vivencia de un amor que muy probablemente ya se habra transformado al que habia en los primeros años de convivencia, a la aceptación de envejecer sin cordura ni medida, al sentirnos juntos pero muchas veces abandonados. En esta fase el placer con la pareja no existe por que es aqui en donde comienza a ser placentero lo que hay de puertas hacia afuera.
Neruda solía decir, que el mundo de las personas deberia estar lleno de amantes, por que un amante no es más que el inmenso placer que genera hacer algo con todo el impetú posible.
Mi sugerencia; entreguemonos al placer, seamos amantes de nuestra pareja, los placeres son mas impactantes cuando son novedosos, cuando no hay una rutina alrededor de ellos sino que por el contrario, hacen de la convicencia una nueva experiencia.
llenemos esa experiencia de aventura, de riesgo, que sea un camino sin final, de una entrega total y de un compromiso con el otro, para que la convivencia cada día nos enriquezca y nos disfrute.
Gracias por sus comentarios.