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martes, 29 de abril de 2014

Esforzarse, no es sufrir.

Una de mis pasiones, después de mi trabajo como terapeúta, es el ascenso a nevados, las caminatas ecológicas y todo aquel contacto con la naturaleza que me permita recargarme de energia, de respirar aire puro y de entender como en esa relacion con la vida silvestre y con el medio ambiente está el futuro de nuestra supervivencia. En este ejercicio se han venido involucrando personas a las que por una u otra razon, el tema tambien les llama la atención y entonces organizamos grupos de aventura en donde sacamos nuestro Indiana Jones que todos llevamos por dentro y como grandes expedicionarios nos disponemos a transitar los bellos caminos de nuestra geografía Colombiana. El lugar de esta aventura, fué la sierra nevada del cocuy,  uno de los parajes mas bellos que yo haya conocido, pero no solo por su belleza natural, sino  por las enseñanzas a las que me he visto sometido en cada uno de sus recorridos, por que me ha permitido aprender de aquellas personas, que en cada una de nuestras aventuras, se han dado a la tarea de  resignificar muchas cosas en sus vidas, encontrando que el límite mas grande que hay en nuestro diario vivir es uno mismo.
Este artículo lo que busca es mostrar la forma, como algunos de esos acompañantes de viaje se han enfrentado a este tipo de experiencias, encontrando en el esfuerzo, el principal recurso para darle un nuevo sentido de vida a su vida. En nuestro último viaje, del 16 al 20 de abril del 2014 se unio una hermosa Alemana para participar en esta actividad. Como buena extranjera al hacer su inscripcion se cercioró por todos los medios que le brindaban sus posibilidades, de que yo si era yo, y que no iba a ser tumbada ni a perder su dinerito en otra de esas comunes estafas en donde los Colombianos hemos aprendido por esas cosas del azar a destacarnos en muchas partes del mundo. No podria revelar la edad de tan bella dama, pero garantizo que despues de 38 años en nuestro país mucha de nuestra idiosincracia ya hace parte de ella. Cuando uno piensa en Alemanes, piensa en frialdad, en rigidez, en poco humor, en distancia afectiva en normas y reglas. puede ser que mi percepción este sometida solo a los pocos alemanes que he conocido o a lo que culturalmente he aprendido en los documentales que he visto de ellos. Pero que grata sorpresa, tendria que resaltar que si hubo alguien cálido, de buen humor, con toda la disposición del mundo y con toda la actitud para cumplir con sus metas propuestas fue nuestra ilustre representante de los teutones. 
Ascender 5100 msnm, para alcanzar el borde de nieve de la cima nevada mas alta de los andes Colombianos no es tarea fácil. sin embargo en este viaje aprendi y creo que sin temor a equivocarme, que cuando comenzamos a entender nuestros própositos en la vida con una perspectiva distinta a la que comunmente, por nuestras diferentes experiencias en donde lamentablemente muchas de ellas son negativas estamos acostumbrados, los resultados son distintos. Aprendi gracias a nuestra participante:

1. Una cosa es esforzarse y otra muy distinta sacrificarse. En el esfuerzo siempre encontraremos una ganacia secundaria. sentimos que debemos dejar el aliento en lo que nos proponemos por que al final obtendremos un beneficio. por que en el esfuerzo esta implícito el interés y la motivación, por que depende de uno y los resultados del mismo evaluaran los recursos que involucramos para obtener lo obtenido. 
2. El esfuerzo nos muestra de que estamos hechos, de qué somos capaces, hasta donde podemos llegar con la firme convicción de que el resultado siempre sera positivo. 
3. En el esfuerzo no hay rivales, nisiquiera competencia, todo se hace con uno mismo, con ese yo interior que en ocasiones nos limita y no nos deja cumplir nuestros sueños y nuestras ilusiones. 
4. Que el sacrificio siempre exige la perdida de algo, que cuando nos sacrificamos nos sentimos disminuidos, nos sentimos infravalorados por que a diferencia del esfuerzo, en el sacrificio siempre esta presente el halo del fracaso. 
5. Sacrificarse involucra otras personas, por que siempre lo hacemos por terceros, el esfuerzo es personal el sacrificio es mas colectivo. 
6. El esfuerzo a diferencia del sacrificio nos une, nos convoca, nos genera complicidad y termina siendo una forma agradable de relacionarse, de establecer vínculos. Los esfuerzos compartidos generan vínculos mas fuertes en la pareja.

Al iniciar nuestra travesía, despues de las primeras 4 horas de caminata, en la búsqueda de un valle denominado lagunillas, en donde 3 lagunas espectaculares nos permitirian conectarnos con la energia de la naturaleza, nuestra amiga Alemana decia, con cada paso que daba, "hasta aqui llegué Ruben", con ese acento coloquial y su español muy bien hablado que nos hacia reir a cada una de sus intervenciones. por que para ella, acostumbrada a una vida de oficina pero de poca aventura como esta, la altura la estaba afectando mucho. Fué en este momento en donde la palabra "esfuerzo", hizo su aparición. solo le dije que cumplir con sus objetivos eran el resultado de su propio esfuerzo y que debía ir a su propio ritmo. Pues bien, al segundo dia de actividades, que ya representaba una caminata mayor y que implicaba el ascenso de nuestra meta final, la primera en levantarse, en alistarse y en prepararse fue ella. Sus ojos azules, que desde las cabañas Kanwara miraban con desafío el camino que teniamos por delante, estaban fijos en el borde de nieve que se vislumbraba a unas 4 horas de camino en constante ascenso y que hacen parte del ritak uwa blanco que se convertia en nuestro destino final. Con cada paso que dabamos para cumplir ese objetivo las palabras de limitación, negatividad o fracaso, ya habian desaparecido de su vocabulario. su constante era que solo ella era su propio limite y que dependia de su propio esfuerzo.
Pues bien, 5 horas despues, de una llovizna pertinaz, de un ascenso en el que a veces sentimos que a cada paso la cima se aleja en lugar de acercarse, de observar los rostros de cansancio y de agotamiento, de sentir que el mal de altura se puede hacer presente, todo nuestro grupo llegó. Pero ella nuestra bella amiga Alemana, soltó una sonrisa que destacó su inmensa felicidad, no por alcanzar la nieve  pues en su tierra natal es natural convivir con ella, sino por que a los 5100 msnm se demostró que ni la altura, ni el cansancio, ni el frio, ni la llovizna derrotarian lo que a traves de su esfuerzo era capaz de lograr.

Esta indiscutiblemente fué una lección sobre el esfuerzo, sobre lo que significa y sobre la importancia de interiorizarlo y aplicarlo en cada una de nuestras actividades cotidianas. Los resultados obtenidos a traves del esfuerzo realizado, nos deja un dulce sabor en la boca como el que deja cualquiera de nuestros manjares colombianos cuando ganas de postre si tenemos. 


Gracias por sus comentarios.

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